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Los muebles de madera solo amontonan polvo, o bien eso creemos. En verdad, pasan por más cambios durante su vida – acumulación de moho, máculas de agua y acumulación de pulimento son solo unos pocos. Estos simples trucos y consejos de limpieza pueden sostenerlos en buen estado mientras que continúen en su casa.
Limpiar y dar brillo a los muebles es una cosa que todos hacemos diariamente, mas con el tiempo, el pulimentado, la humedad y el polvo se combinan para dejar máculas feas y dispares. La limpieza profunda de los muebles de cuando en cuando es buena, mas debe hacerse sin dañar el acabado.
La limpieza profunda de los muebles en general implica los próximos pasos;
- Desempolve tenuemente los muebles para suprimir la suciedad de la superficie
- A continuación, quitar la suciedad más compacta mezclando líquido para lavar platos diluido y agua. Limpie con un paño húmedo suave sumergido en esta solución diluida
- Use un paño nuevo y limpio para secar bien los muebles desde entonces.
En el caso de otros inconvenientes persistentes, ahora se presentan ciertas soluciones opciones alternativas,
Eliminar las máculas de agua
Las máculas de agua acostumbran a formarse cuando se pone una bebida caliente o bien fría de forma directa sobre los muebles de madera. Aplicando pasta dentífrica sin gel de manera directa en el sitio, y frotando con un paño suave se puede eliminar la mácula. Para las más bastante difíciles, entremezclar bicarbonato de sodio y pasta dentífrica, frotar de forma profunda con un paño húmedo y secar bien.
Quitar el pulimento viejo
Con la mayor parte de los hogares que tienen muebles viejos, es esencial remover la acumulación de pulimento durante múltiples años a fin de que los muebles se vean como nuevos. Para esto, se ponen dos bolsas de té en agua hirviendo. Cuando se enfríe, sumerja un paño suave en el té, escúrralo y frótelo sobre la madera. El ácido tánico del té suprime cualquier acumulación de pulimento y hace que la madera reluzca.
Eliminar las marcas rebeldes
Marcas de boli de esbozo, la tinta en la madera es más frecuente de lo que piensas y realmente difícil de eliminar. Mezcle una cucharada de bicarbonato de sodio con una cucharada de agua, transfórmela en una pasta para meditar y con un paño suave sumergido en esta mezcla, frote suavemente la mácula hasta el momento en que desaparezca por completo. Una vez hecha, séquela bien.
Cuando los procesos de limpieza precedentes se hayan completado, limpie la madera con pulimento para conservar el acabado y hacerla relucir. Un simple pulidor de madera puede hacerse en casa con uno taza de aceite de oliva y 1/4 de vinagre blanco. Use un paño suave para adecentar esto en la veta y pulimentar hasta el momento en que esté refulgente. Cuanto más cuidemos la madera, mejor avejentará con gracia y preservará su brillo.
Para más usos de este género de vinagre blanco, lea acá.